Volviendo a la alegría plena


Cuando el cuerpo no tiene modo de expresión para algo sublime llora, cuando conoce las lagrimas está listo para saber que es la alegría. Ese momento en el que sentís la alegría después de haber pasado por el camino mas oscuro. Este que estaba lleno de ramas que te provocaban golpees y caídas humillantes, de lluvias que te hacían pensar que tus lagrimas eran tan pequeñas que no tenían ningún valor, ahí es cuando la felicidad la vivís como debe ser vivida y apreciada.